
En un compromiso firme por brindar apoyo integral a mujeres indígenas sobrevivientes de violencia, la Asociación Grupo Integral de Mujeres Sanjuaneras (AGIMS) ha implementado dos poderosas herramientas de sanación y empoderamiento: el proyecto "Sanando entre Hilos" y el teatro.
AGIMS reconoce que el proceso de sanación es crucial para romper los ciclos de violencia que afectan a las mujeres en sus comunidades. Al reconocer y abordar la violencia de género, se desencadena un proceso donde la sanación emocional y espiritual desempeña un papel fundamental. Desde la cosmovisión maya, la armonía con los elementos naturales y espirituales es esencial para la recuperación integral.

El proyecto "Sanando entre Hilos" va más allá del tejido; es un proceso de sanación individual y colectiva. Las mujeres sobrevivientes aprenden a tejer no solo hilos, sino también lazos de confianza, autoestima y apoyo mutuo. Este proceso, simbólico y terapéutico, les permite liberar emociones y experiencias traumáticas mientras recuperan habilidades y crean piezas únicas de arte.
El teatro es otra herramienta poderosa utilizada por AGIMS para empoderar a las mujeres y romper el silencio. A través de obras teatrales como "Todas las flores tienen espinas", "Tejido de palabras" e "Hijas de la luna", las mujeres comparten sus historias de supervivencia y desafían la normalización de la violencia. Estas presentaciones no solo actúan como una plataforma para alzar la voz, sino que también promueven un cambio cultural y social al reflejar la realidad que viven muchas mujeres.

El impacto de estas actividades no se limita a lo individual; se extiende a nivel comunitario. Las obras de teatro educan a la comunidad sobre los diferentes tipos de violencia y se convierten en un impulso para romper el ciclo de abuso. El proyecto "Sanando entre Hilos" empodera a las mujeres económicamente mientras sanan, ya que muchas de ellas encuentran en el tejido una fuente de ingresos para sus familias.
AGIMS trabaja en el territorio Kaqchikel, donde la población indígena es significativa. A través de más de 20 años de experiencia, han brindado apoyo a más de 200 casos anuales, brindando atención civil y ejecutiva a las mujeres que buscan ayuda. Su compromiso con la sanación y el empoderamiento de las mujeres indígenas es un testimonio del cambio positivo que están generando en sus comunidades.
Estas actividades no solo sanan las heridas individuales, sino que también desafían las estructuras culturales y sociales que perpetúan la violencia. AGIMS continúa siendo un faro de esperanza y apoyo para las mujeres indígenas, guiándolas hacia un viaje de empoderamiento, sanación y transformación en sus vidas y comunidades.
